Reconociendo Mis Heridas Afectivas

abril 17, 2021

 

Reconociendo mis heridas Afectivas


A lo largo de la vida y en la historia personal hay distintos hechos y acontecimientos que influyen en el desarrollo y vivencia de una sana afectividad, estos acontecimientos no necesariamente se buscan, tal vez por la corta edad, la ingenuidad, impulsividad e inconsciencia, simplemente se dieron.

En dichos sucesos la familia cumple un papel fundamental ya que es el primer núcleo social y el que más enseñanzas deja en la persona. Es dentro de la familia donde el ser humano alcanza la plenitud personal, que consiste en tener la capacidad de pensar (inteligencia), capacidad de actuar (voluntad), capacidad de decidir (libertad) y por ultimo capacidad de darse (amar). San Juan Pablo II en la homilía de la jornada de la familia en 1980 dice que:

  El hombre no tiene otro camino hacia la humanidad más que a través de la familia. Y la familia debe ser puesta como el fundamento mismo de toda solicitud para el bien del hombre y de todo esfuerzo para que nuestro mundo humano sea cada vez más humano. De esta manera, la familia está llamada a ser una comunidad de vida y amor.

En consecuencia y como se vive en la actualidad la mayoría de personas han vivido una ruptura en alguna esfera de su vida ya sea familiar, interpersonal, afectiva, relación de noviazgo, ruptura entre relaciones de amistad, así mismo se van creando heridas emocionales ya afectivas que impiden amar y ser amado. Para entender más a profundidad se entenderá el término de herida afectiva

¿Qué son las heridas afectivas?

Las heridas afectivas las definiría como un choque que produce un daño duradero en todas las dimensiones de la persona, está herida aflige duele y atormenta el ánimo o psique de la persona en pocas palabras de habla de un hecho o acontecimiento en la vida o historia de la persona que le produce dolor o sufrimiento

El objetivo está en reconciliar, curar y sanar la herida, de tal manera que se pueda enfrentar y cambiar las consecuencias que esta ha generado a lo largo del tiempo, a veces parece imposible, sin embargo si se tiene una mirada de esperanza y confiada en Dios, es por su gracia y también trabajando en sí mismo. Por lo tanto, se hace posible un proceso de reconocimiento y curación incluso de toda la vida.

Frente  a las heridas afectivas se recomienda irlas trabajando poco a poco, pero antes de llegar a este punto es necesario hacer un esfuerzo consciente de conocer cada una de ellas e identificarlas, por lo tanto resulta necesario empezar un proceso de reconciliación y sanación interior, con la ayuda de personas que sepan del tema como: sacerdotes, guía espirituales, profesionales en salud como psicólogos, laicos comprometidos instruidos en el tema.

5 heridas de la infancia

·         Miedo a la traición: este tipo de herida surge en la infancia cuando se ha experimentado sensación de engaño por parte de los padres, cuando los padres no cumplieron una promesa o no brindaron protección cuando se esperaba.

Algunas  manifestaciones de esta herida son: frustración, rabia, envidia hacia los que otros tienen, desconfianza, baja autoestima, necesidad de ejercer control sobre otros

·         Miedo al rechazo: este tipo de herida puede darse debido a experiencias o percepción de no aceptación por parte de los padres, familiares o amigos, así es como surge un sentimiento de autodesprecio, que lleva a la persona a pensar que no merece aceptación por parte de los demás.

Algunas manifestaciones de esta herida son: autorechazo hacia los pensamientos propios, sentimientos y vivencias, interpretar todo mediante la herida, viendo todo a su alrededor como rechazo, las criticas le generan sufrimiento, necesidad de reconocimiento y aprobación

·         Miedo a la humillación: está herida surge cuando la persona en la niñez se siente criticada o desaprobada por parte de los padres especialmente de los que fueron muy estrictos

Algunas de la manifestaciones de esta herida se va desarrollando a lo largo del tiempo con la personalidad generalmente tienden a ser dependientes.

·         Miedo a la injusticia: está herida se presenta en la infancia cuando se percibe una actitud fría por parte de los padres o cuando son autoritarios en el proceso de crianza

Algunas manifestaciones de esta herida se presentan de la siguiente manera: incapacidad para mantener diálogos con opiniones diversas, intenciones permanentes de ganar el poder

·         Miedo al abandono: está herida surge cuando la persona no sabe ni puede estar sola, de hecho cuando se sufre por esta herida la persona tiende a abandonar a otros una de las manifestaciones más comunes es el miedo a una separación de una persona que represente afecto como padres, amigos, relación de noviazgo, también se da la inseguridad.

Ahora que conoces que es una herida y cuales son la más frecuentes que se presentan a lo largo de la vida con sus consecuencias, la invitación finalmente es que seas consciente de ellas y trabajes para que finalmente puedas amar con libertad y ser amado siempre de la mano de Dios

Bendiciones 



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